214 FAMILIAS SE INSTALARÁN EN NONGUÉN
. Llegan desde la Aguita de la Perdiz y desde el Cerro La Polvora.
El Municipio penquista, compró un terreno de 3,3 hectáreas al final de Los Lirios . Inversión que permitirá construir 214 casas, para familias que fueron damnificados del temporal de 2005. El predio está ubicado a un costado de la Población Lautaro, al final de los Lirios, y a un costado de del cerro, en lo que antes fuera parte de la Chacra Castellón.
Según fuentes, estas familias proceden de los sectores Agüita de la Perdiz y Cerro La Pólvora, lo que traería molestia a los habitantes de Nonguén y los Lirios.
Se trata del reasentamiento de alrededor de 800 personas, lo que significa un tremendo impacto social que podría perjudicar el habitat de estos barrios.
Concretamente, la molestia y temor radica en que pudiesen llegar personas con malos antecedentes, lo que perjudicaría la seguridad y tranquilidad de estos barrios.
Roberto Acuña F., quién reside en Los Fresnos, señala “ Ojalá sea gente tranquila y de buenos modales de vida, por que de lo contrario se podría crear un punto peligrosos y molesto para las familias de aquí”
Según la alcaldesa Jacqueline van Rysselberghe se levantarán viviendas de entre 45 a 50 metros cuadrados, de albañilería, terminadas y con living-comedor, cocina, baño y dos dormitorios. Las casas estarán emplazadas en un sitio de 100 metros cuadrados cada una, lo que les permitirá a los propietarios ampliarlas.
Noticia relacionada: El Sur.
El Municipio penquista, compró un terreno de 3,3 hectáreas al final de Los Lirios . Inversión que permitirá construir 214 casas, para familias que fueron damnificados del temporal de 2005. El predio está ubicado a un costado de la Población Lautaro, al final de los Lirios, y a un costado de del cerro, en lo que antes fuera parte de la Chacra Castellón.
Según fuentes, estas familias proceden de los sectores Agüita de la Perdiz y Cerro La Pólvora, lo que traería molestia a los habitantes de Nonguén y los Lirios.
Se trata del reasentamiento de alrededor de 800 personas, lo que significa un tremendo impacto social que podría perjudicar el habitat de estos barrios.
Concretamente, la molestia y temor radica en que pudiesen llegar personas con malos antecedentes, lo que perjudicaría la seguridad y tranquilidad de estos barrios.
Roberto Acuña F., quién reside en Los Fresnos, señala “ Ojalá sea gente tranquila y de buenos modales de vida, por que de lo contrario se podría crear un punto peligrosos y molesto para las familias de aquí”
Según la alcaldesa Jacqueline van Rysselberghe se levantarán viviendas de entre 45 a 50 metros cuadrados, de albañilería, terminadas y con living-comedor, cocina, baño y dos dormitorios. Las casas estarán emplazadas en un sitio de 100 metros cuadrados cada una, lo que les permitirá a los propietarios ampliarlas.
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